Catedrática de Derecho Penal de la Universidad de Castilla-La Mancha: en 13 años, las decisiones de los tribunales a favor de medio ambiente no llegan a 50

SANTO DOMINGO. - La catedrática de Derecho Penal de la Universidad de Castilla-La Mancha, Rosario de Vicente Martínez, hizo un análisis de la dinámica de los tribunales españoles, y sostuvo que, en 13 años -desde el 1983, cuando se produce la reforma del Código Penal, hasta el nuevo Código Penal de 1995, con entrada en vigor en 1996-, las sentencias emitidas a favor de medio ambiente no sobrepasan las 50 decisiones.

Esto, a juicio de la profesora española, se debe a varios factores; en primer lugar, a las dificultades causadas por trabas de la norma legal y a la “desconcertante” materia, pues era novedosa para de los jueces; en segundo lugar, afectó la extensión del contenido de las sentencias, ya que el mismo juez tenía que convencerse de la solución a la que iba a llegar, además, los propios jueces y magistrados alegaban falta de formación y conocimiento por parte de la autoridad judicial.

Al emitir sus consideraciones durante su participación en el webinario titulado “Seminario Internacional sobre la Efectividad de la Protección Ambiental a través del Derecho Público, Análisis Comparativo España y República Dominicana”, organizado por el Tribunal Constitucional, el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales de España y la Universidad Autónoma de Santo Domingo, la investigadora dijo que los procedimientos judiciales aumentaron con la aprobación del Código Penal de 1995 y su entrada en funcionamiento un año más tarde, pues esto implicó la creación de fiscalías especializadas de la policía judicial en materia de medio ambiente.

“Todo eso ha llevado a que en el último año (2019) se haya incoado 4910 procedimientos judiciales: 632 sentencias en materia de medioambiente, 984 en ordenación del territorio y urbanismo, 222 en patrimonios históricos, 953 en flora y fauna, 1029 en incendios forestales  y 1090 relativos al maltrato de animales domésticos.

Al final de su ponencia técnica sobre el tema, la doctora en derecho de la Universidad de Salamanca, concluyó destacando que el medio ambiente no es una abstracción, sino el espacio en el que viven los seres humanos y del que depende la calidad de la vida y la salud, inclusive de las generaciones futuras.